jueves, 8 de octubre de 2015

Transtornos
En una sociedad que continúa valorando la delgadez, aun cuando las personas en los Estados Unidos están más gordos que nunca, casi todos se preocupan por su peso como mínimo. Las personas con trastornos en la alimentación llevan dichas preocupaciones a los extremos, desarrollando hábitos alimentarios anormales que amenazan su bienestar e incluso sus vidas. Esta hoja informativa de preguntas y respuestas explica cómo la psicoterapia puede ayudar a las personas a recuperarse de estos trastornos cada vez más comunes.

¿Cuáles son los principales tipos de trastornos en la alimentación?

Hay tres tipos principales de trastornos en la alimentación.
  • Las personas con anorexia nerviosa tienen una imagen distorsionada del cuerpo, que hace que se vean gordas incluso cuando están peligrosamente delgadas. A menudo se niegan a comer, hacen ejercicio compulsivamente y desarrollan hábitos inusuales como rehusar comer delante de los demás, pierden mucho peso y pueden incluso morirse de hambre.
  • Las personas con bulimia nerviosa comen excesiva cantidad de alimentos, luego purgan sus cuerpos de los alimentos y las calorías que tanto temen usando laxantes, enemas o diuréticos, vomitando y/o haciendo ejercicio. A menudo actúan en secreto, se sienten asqueados y avergonzados cuando comen demasiado, pero también aliviados de la tensión y las emociones negativas una vez que sus estómagos están nuevamente vacíos.
  • Al igual que las personas con bulimia, aquellas con el trastorno de comer compulsivamente experimentan episodios frecuentes de comer fuera de control. La diferencia es que los comedores compulsivos no purgan sus cuerpos del exceso de calorías.
Es importante prevenir conductas problemáticas para que no se conviertan en trastornos en la alimentación totalmente desarrollados. La anorexia y la bulimia, por ejemplo, suelen estar precedidas de una dieta muy estricta y pérdida de peso. El trastorno de comer compulsivamente puede comenzar con comilonas ocasionales. Cada vez que una conducta alimenticia comienza a tener un impacto destructivo en el desempeño de las funciones de una persona o la imagen de sí misma, es hora de consultar a un profesional de la salud mental altamente capacitado, como un psicólogo autorizado para ejercer y con experiencia en tratar personas con trastornos en la alimentación.

¿Quiénes tienen trastornos en la alimentación?

Según el Instituto Nacional de la Salud Mental, las mujeres adolescentes y jóvenes representan el 90 por ciento de los casos. Pero los trastornos en la alimentación no son sólo un problema para las mujeres adolescentes, tan a menudo descritas en los medios de comunicación. Mujeres y hombres mayores , asi como niños también pueden desarrollar estos trastornos. Un creciente número de minorías étnicas están siendo afectadas de estas enfermedades devastadoras.
Las personas a veces tienen trastornos en la alimentación sin que sus familias o amigos sospechen que tienen un problema. Conscientes de que su conducta no es normal, las personas con trastornos en la alimentación pueden retraerse del contacto social, ocultar su conducta y negar que sus patrones de alimentación son problemáticos. Hacer un diagnóstico preciso exige la participación de un psicólogo autorizado para ejercer u otro experto de salud mental adecuado.

¿Qué provoca los trastornos en la alimentación?

Determinados factores psicológicos predisponen a las personas a desarrollar los trastornos en la alimentación. Las familias o relaciones disfuncionales son un factor. Los rasgos de personalidad pueden también contribuir a estos trastornos. La mayoría de las personas con trastornos en la alimentación tienen baja autoestima, se sienten indefensas y con una insatisfacción profunda por su apariencia.
Hay características específicas vinculadas con cada uno de los trastornos. Por ejemplo Las personas con anorexia tienden a ser perfeccionistas, mientras que las personas con bulimia son a menudo impulsivas. Los factores físicos como la genética también desempeñan un papel importante para poner en peligro a las personas.
Un amplio espectro de situaciones puede precipitar los trastornos en la alimentación en personas susceptibles. Los familiares o amigos pueden burlarse repetidamente de ellas con relación a sus cuerpos. Pueden participar en gimnasia u otros deportes que ponen énfasis en el peso bajo o una determinada imagen corporal. Las emociones negativas o los traumas como la violación, abuso o la muerte de un ser querido también pueden desencadenar trastornos. Incluso un acontecimiento feliz, como dar a luz, puede provocar trastornos debido al impacto estresante del hecho que implica un nuevo papel en la persona y su imagen corporal.
Una vez que las personas comienzan a tener conductas de alimentación anormales, el problema puede perpetuarse. Comer compulsivamente puede establecer un círculo vicioso activo, en la medida que las personas que se purgan para eliminar el exceso de calorías y dolor psíquico, luego comen compulsivamente un vez más para escapar de los problemas cotidianos.

¿Por qué es importante buscar tratamiento para estos trastornos?

Las investigaciones indican que los trastornos en la alimentación son uno de los problemas psicológicos con menos probabilidades de ser tratados. Los trastornos en la alimentación con frecuencia no desaparecen por sí solos, y dejarlos sin tratamiento puede tener consecuencias graves. De hecho, el Instituto Nacional de la Salud Mental estima que uno de cada diez casos de anorexia termina en muerte por hambre, suicidio o complicaciones médicas como ataques al corazón o insuficiencia renal.
Los trastornos en la alimentación pueden aniquilar al cuerpo. Los problemas físicos asociados con trastornos en la alimentación incluyen anemia, palpitaciones, pérdida del cabello y masa ósea, caries, esofagitis e interrupción de la menstruación. Las personas con trastornos en comer compulsivamente pueden desarrollar presión sanguínea elevada, diabetes y otros problemas asociados con la obesidad.
Los trastornos en la alimentación también están asociados con otros trastornos mentales como la depresión. Los investigadores todavía no saben si los trastornos en la alimentación son síntomas de dichos problemas o si los problemas se desarrollan debido al aislamiento, estigma y cambios fisiológicos causados por los trastornos en la alimentación en sí. Lo que queda claro es que las personas con trastornos en la alimentación tienen mayores índices de tener otros trastornos mentales, que incluyen depresión, trastornos de ansiedad y abuso de sustancias, que otras personas.

¿Cómo puede un psicólogo ayudar a una persona a recuperarse?

Los psicólogos desempeñan un papel vital en el tratamiento exitoso de los trastornos en la alimentación. Estos son miembros integrales de un equipo multidisciplinario que puede ser necesario para brindar la atención adecuada al paciente. Como parte de este tratamiento, se puede consultar a un médico para descartar enfermedades y determinar si el paciente corre peligro físico inmediato. Se puede solicitar a un nutricionista que ayude a evaluar y mejorar que ayude a evaluar y mejorar el consumo nutricional.
Una vez que el psicólogo ha identificado problemas importantes que requieren atención, y desarrollado un plan de tratamiento, ayuda al paciente a reemplazar pensamientos y conductas destructivos por otros más positivos. Por ejemplo, el psicólogo y paciente pueden trabajar juntos para concentrarse en la salud en lugar del peso. El paciente puede llevar un diario de comidas con el fin de crear más conciencia de los tipos de situaciones que desencadenan el comer compulsivamente.
Sin embargo, simplemente cambiar los pensamientos y conductas del paciente no es suficiente. Para garantizar una recuperación duradera, los psicólogos y pacientes deben trabajar juntos para explorar los problemas psicológicos subyacentes al trastorno de la alimentación. La psicoterapia puede ser necesaria para concentrarse en mejorar las relaciones personales del paciente y puede involucrar ayudarlo a ir más allá del hecho o situación que desencadenó el trastorno en primer lugar. La terapia de grupo también puede resultar útil.
Algunos pacientes, en especial aquellos con bulimia, pueden beneficiarse con la medicación. Sin embargo es importante recordar que la medicación debe usarse en combinación con psicoterapia, no para reemplazarla. Los pacientes a quienes se les aconseja tomar medicación deben conocer los posibles efectos colaterales y la necesidad de una supervisión directa del médico.

¿Funciona realmente el tratamiento?

Sí. La mayoría de los casos de trastornos en la alimentación pueden ser tratados exitosamente por profesionales de la atención médica de salud mental y de salud adecuadamente capacitados. Hay que tener en cuenta, que los tratamientos no dan resultados en un corto plazo. Para muchos pacientes, el tratamiento puede ser a largo plazo.
Incorporar la terapia familiar o de pareja en la atención del paciente puede ayudar a prevenir recaídas al resolver los problemas interpersonales relacionados con el trastorno de la alimentación. Los terapeutas pueden guiar a los familiares para que entiendan el trastorno del paciente y aprendan nuevas técnicas para sobrellevar los problemas. Los grupos de apoyo también pueden colaborar.
Recuerde: cuanto más temprano comience el tratamiento, es mucho mejor. Cuanto más tiempo continúen los patrones de alimentación anormales, estos quedarán más profundamente arraigados y serán más difíciles de tratar.
Los trastornos en la alimentación pueden afectar gravemente el funcionamiento y la salud de las personas. Pero las perspectivas de una recuperación a largo plazo para la mayoría de las personas que buscan ayuda profesional son muy buenas. Terapeutas calificados como, por ejemplo, psicólogos autorizados para ejercer y con experiencia en esta área, pueden ayudar a aquellas personas que tienen trastornos en la alimentación a recuperar el control de sus conductas alimenticias y de sus vidas.
Nutrientes
Un nutriente es el material que necesitan las células de un organismo para producir la energía empleada en las funciones de crecimiento, reparación y reproducción, metabolismo, entre otras.
Los alimentos son sustancias que proporcionan a los seres vivientes materia y energía; es decir, las sustancias que se encuentran en los alimentos y que son necesarias para cumplir con las funciones vitales de los organismos, son conocidas como nutrientes.
Los alquimistas griegos de la antigüedad, eran más filósofos que científicos, creían que los alimentos contenían una sola sustancia vivificante; pero a lo largo de los siglos y a medida que ha ido avanzando la tecnología, se ha ido descubriendo un numero mayor de estos elementos nutritivos que contienen una amplia variedad de sustancias químicas que, por conveniencia, se han agrupado en clases abarcantes.
Los nutrientes pueden ser orgánicos e inorgánicos, entre éstos últimos tenemos al agua, que constituye más del 60% de nuestro cuerpo, y es utilizada como medio para la descomposición de alimentos; y a los minerales, que son sustancias que intervienen en procesos enzimáticos y del metabolismo (sodio, potasio, calcio, fósforo, yodo y hierro).
Entre los nutrientes orgánicos se encuentran los carbohidratos, que constituyen la principal fuente energética inmediata del organismo y pueden almacenarse como sustancias de reserva, están en alimentos como frutas, papa, maíz, arroz, etc. Los lípidos o grasas, los cuales son fuentes de energía mayores a los carbohidratos y protegen a los órganos contra los golpes, están en aceites, mantequillas, etc.
También se hallan las proteínas, que están formadas por aminoácidos, se utilizan en la reparación de tejidos y órganos del cuerpo, y son una fuente energética de emergencia, se encuentran en productos lácteos, carnes, huevos, etc. Y por último, las vitaminas que son sustancias orgánicas de muchos alimentos, indispensables para el buen funcionamiento del cuerpo y prevención de enfermedades, están en las frutas, vegetales, leche, etc.
Cabe resaltar, que una buena salud requiere de una combinación de estos alimentos, conocida por nosotros como dieta balanceada.
a que se refiere el hilance energetico
El ahorro de energía o eficiencia energética, consiste en la optimización del consumo energético, cuyo objeto es disminuir el uso de energía pero produciendo los mismos resultados finales.
La energía se utiliza para obtener diferentes resultados, como por ejemplo para calentar la casa en invierno. A menudo se pueden obtener los mismos resultados con diferentes usos energéticos. La eficiencia energética es más alta cuanta menos energía se pierda durante su extracción, transformación, distribución y uso.
El ahorro en la generación de energía se produce por ejemplo por medio de centrales eléctricas con elevado rendimiento, o por medio de la cogeneración que produce simultáneamente energía eléctrica y energía térmica útil.
Podemos también mejorar el ahorro energético por ejemplo haciendo uso de las bombillas de bajo consumo (o lámparas fluorescentes) o con un buen aislamiento térmico en nuestra vivienda.
Como se presenta el gasto energetico
La energía se define como la capacidad para trabajar en distintas funciones. En el estudio de la nutrición, se refiere a la manera en la que el cuerpo utiliza la energía localizada en las uniones químicas dentro de los alimentos. En el organismo, la energía se libera mediante el metabolismo de los alimentos, los cuales deben suministrarse regularmente para satisfacer las necesidades energéticas para la supervivencia del cuerpo. Si bien, a la larga, toda la energía aparece en forma de calor, el cual se disipa hacia la atmósfera, los procesos únicos que ocurren dentro de las células hacen posible primero su uso para todas las tareas que se requieren para mantener la vida. Entre estos procesos se encuentran reacciones químicas que llevan a cabo la GUP síntesis y mantenimiento de los tejidos corporales, conducción eléctrica de la actividad nerviosa, el trabajo mecánico del esfuerzo muscular y la producción de calor para mantener la temperatura corporal.

Gasto energético[editar]

El gasto energético es la relación entre el consumo de energía y la energía necesaria por el organismo. Para el organismo mantener su equilibrio, la energía consumida debe de ser igual a la utilizada, o sea que las necesidades energéticas diarias han de ser igual al gasto energético total diario.
El cuerpo humano gasta la energía a través de varias maneras: en la forma de gasto energético de reposo (GER), actividad voluntaria (física) y el efecto térmico de los alimentos (ETA). Excepto en sujetos extremadamente activos, el GER constituye la mayor porción del gasto energético total (GET). La contribución de la actividad física varía mucho entre los individuos.(1)
El conjunto del gasto energético podemos dividirlo en:
-Tasa metabólica basal
-Gasto de actividad Física
-Acción dinámica de los alimentos

Gasto metabólico basal o metabolismo basal[editar]

Depende de la masa celular activa, es decir, del número y tamaño de células activas que posee un organismo. La masa celular activa varía de una persona a otra según:
  • Tamaño y composición corporal
  • Edad
  • Etapa de crecimiento
La energía que se emplea en el metabolismo basal está destinada a:
Es el estado en el que se consume energía para las actividades mecánicas que brindan sostén a los procesos vitales, como respiración y circulación, se sintetizan constituyentes orgánicos, se bombean iones a través de las membranas y se conserva la temperatura corporal. La mitad de la energía consumida se emplea para satisfacer las necesidades metabólicas del sistema nervioso. Los términos Tasa Metabólica Basal y Gasto energético en reposo, a menudo tienden a confundirse, la diferencia está en la medición de ambos.
La Tasa metabólica basal se mide en la mañana, con el cuerpo en descanso físico y mental completo, relajado, después de que el sujeto se despierta y está en estado de postabsorción (10 – 12 horas después de última comida) y esta representa entre el 60 – 75% del Gasto energético total; mientras que el Gasto energético en reposo, se mide en cualquier momento del día y 3 a 4 horas después de la última comida. El metabolismo basal diario se puede calcular de manera aproximada de la siguiente forma, según Harris-Benedict:
Hombre: 66,473 + (13,752 x peso (kg)) + (5,0033 x estatura (cm)) - (6,775 x edad (años)); Mujer: 65,5096 + (9,563 x peso (kg)) + (1,850 x estatura (cm)) - (4,676 x edad (años))
Como medir el consumo calorico
En muchas ocasiones en Vitónica os proponemos ejemplos de dietas para que toméis ideas para realizar vuestras adaptaciones en vuestra alimentación para conseguir vuestros objetivos, como puede ser una etapa de volumen, una etapa de definición o una etapa de mantenimiento, de ahí que hayamos pensado que es necesario crear una serie para calcular tu dieta paso a paso.
La primera entrada de esta serie para calcular tu dieta paso a paso va a consistir en el cálculo de tus necesidades calóricas, pues como todos sabemos, siempre debemos comer en torno a nuestro gasto diario, más cantidad para subir músculo, menos cantidad para perder grasa, y lo más cerca de nuestro gasto para mantenernos.
Por tanto para empezar con tu dieta y calcular tu necesidades calóricas necesitas saber cuanto gasta tu cuerpo sólo con vivir, sin una actividad extra, como puede ser trabajar, el deporte, caminar o las labores domésticas, esto es lo que se conoce como metabolismo basal.

Calculo del metabolismo basal (MB)

Existen muchas fórmulas para calcular el metabolismo basal pero hay que tener en cuenta que todas son una aproximación de la realidad. Algunas son de andar por casa y otras algo más avanzadas, os reportamos las tres formas más comunes de calcularlo (voy a usar en todas como ejemplo: varón de 30 años, 85kg, porcentaje de grasa 14% y altura 180cm):
A- Fórmula básica: si no te quieres volver loco (cosa que no recomendamos) existe está fórmula que no tiene en cuenta ni edad, ni estatura, ni porcentaje de grasa ni nada de nada:
MB Hombre: 1 caloría x peso en Kg. x 24 Horas
MB Mujer: 0,9 calorías x peso en Kg. x 24 Horas

Ejemplo A: 1 × 85 × 24 h = 2040 kcal
B- Fórmula de Harris-Benedict: es sin duda alguna una la más usadas, aunque aún así sigue siendo una aproximación, cuanto mayor es el índice de grasa o el índice de masa muscular del individuo mayor es el margen de error pero que padece de un margen de error que aumenta en individuos con obesidad:
MB Hombre: 66,473 + (13,751 x peso en kg) + (5,0033 x estatura en cm) – (6,7550 x edad en años)
MB Mujer: 655,1 + (9,463 x peso en kg) + (1,8 x estatura en cm) – (4,6756 x edad en años)

Ejemplo B: 66,473 + (13,751 × 85) + (5,0033 × 180) – (6,55 × 30) = 1933,30 kcal
C- Fórmula de Katch-McArdle: sin duda la más exacta que existe ya que tiene en cuenta la masa corporal magra y la grasa, pero claro esto es un inconveniente porque calcular la grasa suele ser una tarea complicada y que tiene su porcentaje de error en muchas ocasiones (usando básculas de bioimpedancia tiene error, si se usa lipocalibre es casi exacto).
La masa magra se calcular quitando el % de grasa corporal (con el ejemplo de 14% de grasa y pesas 85kg serían 11,9 kg de grasa y (85kg – 11,9kg ) 73,1kg de masa magra, o lo que es lo mismo 85 x ((100 – 14)/100) = 85 × 0,86 = 73,1kg.
MB: 370 + (21.6 x masa corporal magra en Kg.)
Ejemplo C: 370 + (21.6 x (85 × 0,86) = 1948,96 kcal
Factores que aumentan el metabolismo basal
- Mayor masa muscular
- Mayor superficie corporal total
- Género Masculino (Los varones casi siempre tienen mayor masa corporal magra que las mujeres)
- Temperatura corporal, (fiebre o condiciones ambientales frías)
- Hormonas tiroideas.
- Aspectos de la actividad del sistema nervioso (liberación de hormonas de estrés)
- Etapas de crecimiento en el ciclo vital.
- Consumo de cafeína o tabaco.

Cálculo del requerimiento calórico

Pero no nos tenemos que quedar con el metabolismo basal, porque eso sería si no hacemos nada más, es decir, si estuviéramos tumbados en la cama, y poco más, pero eso nadie lo hace, ni siquiera la gente sedentaria, porque caminamos, comemos, andamos, corremos, saltamos, trabajamos… así que tenemos que calcular el requerimiento calórico.
Básicamente existen diferentes tablas para valorar las actividades, pero nos vamos a quedar con las de Harris Benedict propone los siguientes factores por actividad física:
  • Sedentario (poco o nada ejercicio): MB x 1,2
  • Levemente activo (ejercicios livianos, deporte 1-3 veces por semana): MB x1.375
  • Moderadamente activo (ejercicio moderado, deporte 3-5 veces por semana): MB x 1,55
  • Muy activo (ejercicios intensos, deporte 6-7 días por semana) MB x 1,725
  • Hiperactivo (ejercicios muy intensos, trabajo físico, 2 horas diarias o más de deporte): MB x 1.9 actividad ligera
Nosotros nos vamos a quedar con el término medio, la actividad moderadamente activa, ya que tampoco entrenamos todos los días, y no entrenamos mucho tiempo, entren 40 y 70 minutos, así que con los cálculo anteriores nos queda lo siguiente:

Ejemplo A: 2040 × 1.55 = 3162 Kcal
Ejemplo B: 1933,30 × 1.55 = 2996,62 Kcal
Ejemplo C: 1948,96 × 1.55 = 3020,88 Kcal
De momento para finalizar esta primera entrada podemos observar que hay diferencia entre la aproximación y las fórmulas de Harris Benedict y la de Katch-McArdle, que sólo hay unas 25 Kcal diarias. Esto sería nuestro requerimiento de un día de actividad, que en mi caso sería actualmente de 3170Kcal al día. ¿Y en tu caso?

Glándula tiroides

Glándula tiroides
Thyroid gland-es.svg
Tiroides anatomia 01.jpg
Latín[TA]: glandula thyroidea
TAA11.3.00.001
Sistemaendocrino
Precursordivertículo tiroideo (un extensión delendodermo dentro del 2.º arco branquial)
Sinónimos
tiroides;
glándula tiroidea
Enlaces externos
Graypág.3
MeSHThyroid+Gland
[editar datos en Wikidata]
La glándula tiroides (del latín glandem 'bellota', ulam 'pequeño' y del griego antiguo θυρεοειδής 'en forma de escudo') es unaglándula neuroendocrina, situada justo debajo de la nuez de Adán, junto al cartílago tiroides sobre la tráquea. Pesa entre 15 y 30 gramos en el adulto, y está formada por dos lóbulos en forma de mariposa a ambos lados de la tráquea, ambos lóbulos unidos por el istmo.
La glándula tiroides regula el metabolismo del cuerpo, es productora de proteínas y regula la sensibilidad del cuerpo a otrashormonas.
La tiroides tiene una cápsula fibrosa que la cubre totalmente y envía tabiques interiormente que le dan el aspecto lobuloso a su parénquima. Además la aponeurosis cervical profunda se divide en dos capas cubriendo a la tiroides en sentido anterior y posterior dándole un aspecto de pseudocápsula, que es el plano de disección usado por los cirujanos.
La tiroides participa en la producción de hormonas, especialmente tiroxina (T4) y triyodotironina (T3). También puede producir (T3) inversa. Estas hormonas regulan el metabolismo basal y afectan el crecimiento y grado de funcionalidad de otros sistemas del organismo. El yodo es un componente esencial tanto para T3 como para T4. Las glándulas paratiroides ubicadas en la cara posterior de la tiroides sintetizan la hormona paratohormona que juega un papel importante en la homeostasis del calcio. La tiroides es controlada por el hipotálamo y la glándula pituitaria (o hipófisis).
La unidad básica de la tiroides es el folículo, que está constituido por células cuboidales que producen y rodean el coloide, cuyo componente fundamental es la tiroglobulina, la molécula precursora de las hormonas. La síntesis hormonal está regulada enzimáticamente y precisa de un oligoelemento esencial, el yodo, que se obtiene en la dieta en forma de yoduro. El yodo se almacena en el coloide y se une con fragmentos de tiroglobulina para formar T3 o T4. Cuando la concentración de yodo es superior a la ingesta requerida se inhibe la formación tanto T4 como de T3, un fenómeno llamado el Efecto de Wolff–Chaikoff]. La liberación de hormonas está dada por la concentración de T4 en sangre; cuando es baja en sangre se libera TSH, que promueve la endocitosis del coloide, su digestión por enzimas lisosómicas y la liberación de T4 y T3 a la circulación. Las hormonas circulan por la sangre unidas a proteínas, de la cual la más importante es la globulina transportadora de tiroxina.
Las hormonas tiroideas tienen efectos sobre casi todos los tejidos del organismo. Aumentan la termogénesis y el consumo de oxígeno, y son necesarias para la síntesis de muchas proteínas; de ahí que sean esenciales en los periodos de crecimiento y para la organogénesis del sistema nervioso central. También influyen sobre el metabolismo de los hidratos de carbono y de los lípidos. La T4 se convierte en T3 en los tejidos periféricos. La T4 constituye el 93% de las hormonas metabólicamente activas, y la T3 el 7%.
La hormona estimulante de la tiroides (TSH) actúa sobre todos los procesos que controlan la síntesis y liberación de la hormona tiroidea, también actúa aumentando la celularidad y vascularización de la glándula. La TSH está regulada por la concentración de hormona tiroidea libre en sangre periférica por un mecanismo de retroalimentación negativa.
Las glándulas endocrinas 
segregan hormonas (mensajeros químicos) en el torrente sanguíneo, para que éste las transporte a diversos órganos y tejidos en todo el cuerpo. Por ejemplo, el páncreas segrega insulina, que le permite al cuerpo regular los niveles de azúcar en la sangre. La glándula tiroides recibe instrucciones de la pituitaria para segregar hormonas que determinan el ritmo de la actividad química en el cuerpo (a más hormonas en la sangre, más rápida es la actividad química y, a menos hormonas, más lenta es ésta).

Principales glándulas endocrinas[editar]

Las principales glándulas que componen el sistema endocrino son:
Según este concepto, también son glándulas endocrinas, los riñones al producir eritropoyetina, el hígado, el mismo intestino, los pulmones y otros órganos que producen hormonas que actúan a distancia.
Las enfermedades endocrinas ocurren en los casos en que hay muy baja secreción (hiposecreción) o demasiada alta secreción (hipersecreción) de una hormona.
Estas glándulas mandan las hormonas vía torrente sanguíneo, tal como lo hace que órgano que secreta insulina, el cual regula los niveles de azúcar.
Estas glándulas además de transportar hormonas, ayudan dependiendo de su tamaño y peso a aumentar el colesterol del organismo.
Vet
Los VET son cursos técnicos reconocidos a nivel mundial y generalmente son más económicos que los universitarios. Permiten al estudiante cursar certificados o diplomas en un área de interés con un enfoque más práctico que académico.

Factores que afectan la tasa metabólica basal

¿qué es el metabolismo basal? Bueno, resulta que el metabolismo basal es el valor mínimo de energía que una célula necesita para poder sobrevivir. Para llevar a cabo reacciones químicas intracelulares necesarias para la realización de funciones metabólicas esenciales, como el caso de la respiración, esta energía mínima es requerida. Cuando este metabolismo basal aumenta, es bien sabido que se requiere consumir un poco más de alimentos. Los beneficios que pueden obtenerse cuando el metabolismo aumenta, es que lo que comas se va a ir principalmente al mantenimiento y crecimiento muscular, y no tanto a "engordarnos". Son muchos los factores que afectan la tasa metabólica basal, es por eso que muchas personas comen más que otras y aun así no se nota en su aspecto físico o en su peso.

Factores que afectan la tasa metabólica basal

1. La genética: muchos nacen con genética más o menos favorable que otros, comparándose siempre en el aspecto físico. Por ejemplo hay tanto hsombrse como mujeres que pueden "comer a lo loco" y aun así no engordar (ganar grasa corporal). Hay otros y otras que sin necesidad de hacer actividad física siempre tienen un tono muscular como si indicara que entrenaran a diario. Por eso es que se escucha que unos nacen con "metabolismo rápido" y otros con "metabolismo lento". Los de metabolismo rápido son aquellos los cuales sus células usan o utilizan mayores cantidades de energía, lo cual hace que mantengan "a cada rato" con hambre, y que por más que coman este exceso calórico consumido no se noea en su aspecto físico.

2. Género (masculino o femenino): generalmente los hombres tienen una tasa metabólica basal más alta que las mujeres. Ésto es debido principalmente a que por poseer masa muscular en mayores proporciones los hombres necesitan más energía. Por +esto también los hombres tienden a comer más, pero así y todo también tienden a cansarse un poco más rápido y a sentirse muy débiles cuando no consumen alimentos en el menor tiempo posible después de sentir hambre. Las mujeres usualmente tienden a acumular más grasa en el tejido adiposo, en comparación a los hombres, debido a que la testosterona en las mujeres está en niveles más bajos, mientras que en los hombres es una de las causantes que el exceso de grasa no sea tanto y que la masa muscular aumente. Claro está que ésto también depende de la genética y de los hábitos de cada persona, porque también pueden haber mujeres que no engorden fácilmente y hombres que si lo hagan.


3. La edad: parece ser que la tasa metabólica basal reduce con el pasar de los años. Expertos dicen que después de los 25 disminuye en un 2%, aproximadamente. Esto también es notorio en los niños, adolescentes y jóvenes (mujeres y hombres) que necesitan más aportes energéticos para poder crecer saludablemente. Obviamente los excesos son los que llevan a la obesidad y otras patologías como la diabetes y la anemia (cuando la nutrición es deficiente).



4. Peso: A mayor peso la persona puede disminuir o aumentar su metabolismo, pero siempre y cuando este peso sea principalmente ganado en masa muscular y No en grasa corporal, ya que si es en grasa el metabolismo puede disminuir. Todo esto porque los músculos necesitan de más energía (proveniente de los alimentos) para poderse mantener y crecer.

5. Superficie corporal (talla): aquí entran en juego el peso y la altura de cada persona. Generalmente las personas entre más altas, más tienden a tener un metabolismo rápido. Es decir que tienden a requerir más energía, a comer más, y a No engordar o por lo menos no hacerlo en exceso.

6. Porcentaje de grasa corporal: esta parte se relaciona con la número 4 ya que cuando hay menor grasa corporal se tiende a tener un metabolismo un poco más rápido, y si hay buen porcentaje en masa muscular, tiende a ser aun más rápido. Todo esto puede indicar que las personas pueden comer bastante, y aun así difícilmente engordan debido a que esas calorías que consumen se van principalmente al mantenimiento y crecimiento muscular.

7. Dieta: obviamente No solo importa las cantidades de alimentos que se consuman, sino que también cuenta mucho la calidad de alimentos que ingerimos. Por ejemplo, si nuestra dieta es rica en carbohidratos simples sin valor nutricional como los dulces, pasteles, etc, éstos hacen que podamos ganar grasa corporal fácilmente, la cual se acumula alrededor de nuestros órganos (grasa visceral) y en nuestro tejido adiposo. Esta ganancia de grasa ocasiona que el metabolismo se vuelva lento, lo que quiere decir que las células podrán requerir menos energía, lo que se traduce es que entre más comida se consuma, menos energía requerirá ser usada y por ende será almacenada en el tejido adiposo como "grasa de reserva", principalmente.



8. Glándulas endocrinas: el sistema endocrino cuenta con glándulas que segregan hormonas. Muchas de éstas controlan los niveles de grasa corporal y de masa corporal; también pueden influir de manera negativa o positiva en el metabolismo basal. Por ejemplo, niveles altos de tiroxina o de adrenalina pueden aumentar el metabolismo basal, lo que se traduce en que la persona requiere usar y, a la vez, necesitar más energía para "funcionar".

9. Nivel de actividad física: si la persona es sedentaria puede tender a tener un metabolismo lento y, posteriormente, a tener más riesgos de ser obesa. Por el contrario, aquellos que practican actividad física de manera constante tienden a tener un metabolismo más rápido, lo que quiere decir que lo que consuma se va principalmente al mantenimiento y crecimiento del tejido muscular, y no tanto a acumularse en el tejido adiposo, como ya mencioné en los párrafos anteriores.

Si tienen alguna duda, pueden escribirme en los comentarios ya que soy Licenciado en Educación Física y Deportes e Instructor de gimnasio con conocimientos en nutrición. Saludos.

REQUERIMIENTO DE ENERGÍA

Estimación de requerimientos de energía y macronutrientes para individuos adultos sanos.

El cálculo de requerimientos se compone de:
  • Requerimientos de energía
    • Gasto Energético en Reposo
      • Calorimetría Indirecta
      • Fórmulas de predicción
    • Termogénesis
    • Gasto por actividad física
    • Gasto Energético Total
  • Distribución de macronutrientes

Requerimiento de energía

El requerimiento de energía (R.E.) de un individuo se define como la cantidad de energía que se consume a partir de los alimentos capaz de brindarle un balance con el gasto de energía y que le permite tener un buen estado de salud a largo plazo.
Si el consumo de energía a corto plazo se encuentra por arriba o por debajo del gasto, se espera que se produzca una modificación en las reservas corporales de energía. Si este imbalance se mantiene en el largo plazo, se pueden producir alteraciones en la composición corporal que pueden tener consecuencias negativas en la salud. La cantidad de energía presente en los alimentos usualmente se expresa en kilocalorías (kcal).
Una kilocaloría es la cantidad de calor necesario para aumentar la temperatura de 1 litro de agua en 1ºC, a partir de los 15ºC1.
La unidad internacional para medir energía es el joule (J), siendo que:
1 kcaloría= 4.184 kj
El gasto energético total diario (G.E.T.) de un individuo está determinado por la suma del gasto energético en reposo, la termogénesis y la actividad física.
  1. Gasto energético en reposo (G.E.R.)
Es la cantidad de energía que se gasta para mantener las funciones corporales normales y la homeostasis en condiciones de reposo y de termoneutralidad. Estas funciones corporales incluyen la respiración, circulación, bombeo de iones a través de membranas, consumo del sistema nervioso central y mantenimiento de la temperatura corporal.
Se diferencia de la tasa metabólica basal (T.M.B.) en que esta se mide por la mañana inmediatamente después de despertar y sin haber realizado ninguna actividad física, después de un periodo de al menos 12 horas de ayuno.
Sin embargo, se considera que para efectos clínicos y prácticos lo importante es determinar el G.E.R., pues este es el principal contribuyente del G.E.T. y a su vez este incluye el metabolismo basal.
El G.E.R. está determinado principalmente por la edad, el género y el tamaño corporal determinado según el peso y la talla1, y es el componente individual más importante del G.E.T. de un individuo, con excepción de aquellos casos en los que el nivel de actividad física sea alto, por ejemplo en atletas de alto rendimiento.
El G.E.R. es el principal predictor del G.E.T. y se puede determinar
por métodos directos e indirectos:
Método directo: medición por calorimetría indirecta
Método indirecto: estimación por fórmulas matemáticas de predicción.
  • Medición del G.E.R. por calorimetría indirecta
  • La calorimetría indirecta (C.I.) es un método que estima el consumo de energía mediante la medición directa del consumo de oxígeno en un periodo determinado de tiempo. La principal aplicación clínica de la C.I. es la estimación del G.E.R.
    • Fundamento teórico: el método se basa en el principio de que los macronutrientes necesitan de oxígeno para ser oxidados en la cadena respiratoria, al final de la cual se utiliza O2 y se obtiene CO2 + agua + calor, de ahí se deriva el nombre de “calorimetría”, y se apellida “indirecta” porque no se mide directamente el calor producido al oxidar los macronutrientes, sino el oxígeno utilizado para esa oxidación3. Aunque el consumo de oxígeno para oxidar los diferentes macronutrientes varía como se muestra en el cuadro Nº 1, en realidad se sabe que el organismo metaboliza simultáneamente una mezcla de ellos, por lo que en la práctica se utiliza un valor promedio denominado Equivalente Calórico Medio del Oxígeno, el cual es una media ponderada de los tres valores (grasas, carbohidratos y proteínas) y se ha calculado en 4.83 kcal/LO2. Este valor constante es el que permite calcular el G.E.R. a partir del consumo de oxígeno (VO2) que se mide con la C.I..
    • Estandarización: dado que la C.I. implica la medición de un gas (oxígeno), los aparatos modernos se calibran en forma automática de acuerdo con las condiciones ambientales presentes en el lugar y al momento de realizar la prueba como temperatura, presión atmosférica, fracción de oxígeno en el aire ambiente y humedad relativa.
    • Duración: la medición por C.I. usualmente dura de 10-20 minutos. En ese periodo se mide el VO2 y el resultado se extrapola a las 24 horas para estimar el G.E.R. por día.
    • Ventajas: facilidad técnica para realizar la medición, la precisión de los resultados y que los equipos usualmente son portátiles.
    • Desventajas: la principal desventaja puede estar el costo inicial del equipo, aunque no así el costo de la prueba.
    Cuadro Nº 1
    Energía resultante de la oxidación de los macronutrientes
           Macronutriente
    Energía/Consumo O2
    (kcal/L02)

    Carbohidratos

    5,05

    Grasas

    4,70
    Proteínas
    Equivalente Calórico Medio del O2
    4,50
    4,83
    Fuente: Adaptado de Mataix, 2005.
  • Predicción del G.E.R. por medio de fórmulas matemáticas
  • Existen publicadas en la literatura unas 27 fórmulas matemáticas (cuadro Nº 2) diseñadas para predecir el G.E.R. a partir de variables como la edad, peso, talla y masa libre de grasa.
    Cuadro Nº 2
    Fórmulas de predicción del Gasto Energético en Reposo
                   Autor
    Fórmula



    Harris-Benedict (1919)
    H:   P X 13.7516 + HTCM X 5.0033 – EDAD X 6.755   + 66.473
    M:  P X 9.5634   + TCM X 1.8496    – EDAD X 4.6756 +655.0955

    Harris-Benedict (1984)

    H:   P X 13.397+ HTCM X 4.799– EDAD X 5.677+ 88.362
    M:  P X 9.247+ TCM X 3.098– EDAD X 4.33+ 477.593


    Harris-Benedict (1990)
    FAO/WHO/UN (1985)
    H:   P X 13.75+ HTCM X 5.03– EDAD X 6.75+ 66.5
    M:  P X 9.56+ TCM X 1.85– EDAD X 4.68+ 655.1
    H 18–30 años:   15.4 X P – 27 X TM + 717
    H 30–60 años:   11.3 X P – 16 X TM + 901
    >60 años:       8.8 X P + 1128 X TM - 1071
    M 18–30 años:  13.3 X P + 334 X TM + 35
    M 30–60 años:  8.7 X P - 25 X TM + 865
    >60 años:      9.2 X P + 637 X TM - 302

    Owen (1986)

    H: P X 10.2 + 879
    M: P X 7.18 + 795

    Owen-MLG (1987)

    M: 22.3 X MLG + 290
    F:  19.7 X MLG + 334
    Mifflin (1990)
    9.99 X P + 6.25 X TCM - 4.92 X EDAD + 166 X SEXO – 161

    Mifflin-MLG (1990)

    19.7 X MLG + 413
    H=hombres M=Mujeres P=Peso TCM=Talla en cm TM=Talla en metros MLG= Masa libre de grasa
    SEXO= 1 para hombre, 0 para mujer
    Fuente: Adaptado de Weijs, 2008
    Sin embargo, la fórmula más ampliamente utilizada tanto para fines clínicos como de investigación en el mundo es la fórmula de Harris-Benedict.